jueves, 25 de agosto de 2016

Cuando adoptar un perro se vuelve un problema. Parte 1

En mi carrera de entrenador, en la que llevo 28 años que han transcurrido como un suspiro, y los 18 años ejerciendo como médico veterinario, he presenciado varios cambios en la forma de pensar de la gente que tiene perros en su casa:



He visto gente que tenía al perro de la puerta hacia afuera y ahora vive con sus perros durmiendo en su cama, gente que tenía perros en la azotea y ahora los tiene integrados a la familia, gente que buscaba tener perros de raza y ahora toma cualquier perro vagabundo y lo introduce en su hogar...

Actualmente está de moda la adopción de "perros de la calle" aunque mejor deberíamos llamarlos "de vida libre", existiendo varias formas o maneras de llevarlo a cabo:








¿Adoptar es malo?

Primero quiero decir que no tengo nada en contra de las "adopciones" pero difiero de los métodos que emplean los autodenominados "protectores" para llevar a cabo este proceso, ojo, no digo que lo que hagan sea malo, lo que digo es que lo están haciendo mal, espero se comprenda la diferencia.

En una de ellas alguien decide que quiere un perrito adoptado (normalmente después de ver una película o programa de televisión) y ¡comienza la operación adopción! busca por medio del internet alguna persona o lugar en donde pueda llevarla a cabo, después de encontrar la más cercana a su domicilio o la que primero le aparece en el buscador, llama para pedir por favor un perrito en adopción, después de que hace un gran esfuerzo por retener la lista de requisitos, decide anotarla y se presenta al otro día con su solicitud en la mano en el "albergue", el cual normalmente es la casa de una persona que alberga decenas de perros "rescatados" o sea tomados de la calle donde vivían libremente OJO, no dije felizmente, ya que en la naturaleza la vida libre es de lo menos feliz que hay.

Una vez en el albergue o refugio comienza el interrogatorio: (Información verídica tomada de un formato de adopción de un centro de adopción reconocido)


1.- Comenzando por los datos personales (Si, esos que en malas manos pueden ser utilizados en tu contra)
2.- ¿Qué persona te autoriza a adoptar? (Puedes poner que tu mamá, pero si eres adulto se ve medio tonto, de todas formas debes responder algo)
3.- ¿Está toda la familia enterada de que se va a adquirir un animal de compañía? (Eeeh, comienzan los problemas en caso de que hayas olvidado consultar con tu cónyuge)
4.- ¿Está toda la familia de acuerdo en adquirir un animal de compañía? (Siguen los problemas en caso de que hayas olvidado pedirle permiso a tu cónyuge)
5.-La mascota que quieres la consideras como:
      -Un amigo
      -Un guardián
      -Un miembro de tu familia
      -Una compañía
      -Un animal
(Date por frito si respondiste que un guardián o que un animal, ya que la susceptibilidad de la persona "protectora" varía de manera proporcional a lo que tú desees el perrito)
Y sigue por más de treinta preguntas que rayan en lo personal y lo absurdo: tales como si planeas embarazarte (si fueras a pedir trabajo eso sería un delito), cómo es tu casa, cómo quieres a la mascota de carácter, alegre, juguetón , tranquilo (ni siquiera te han permitido ver a los perros y quieren que sepas como lo quieres) que harías con el "peludito" (por alguna razón esta gente cree que llamarle perro a un perro es peyorativo) si tuvieras que cambiarte de vivienda que pasaría con él y por último que le pasaría en caso de que murieras (como carambas puedes saber que va a pasar, pero bueno).





Después de responder el cuestionario por fin puedes pasar a ver los perritos, que en el mejor de los casos se encuentran todos juntos tras de una malla en un gran patio o terreno, los observas  y en este momento te preguntas cual será el adecuado.




<<Punto importante>> JAMÁS, o sea, JAMÁS se te ocurra preguntar ¿que razas tienen? ya que eso genera una violenta reacción de los animalistas que va desde correrte con cajas destempladas (siempre quise escribir eso) hasta preguntarte si tú tienes sangre azul y que lleves tu linaje para ver si algún "peludito" quiere irse contigo. Lo que no entienden los "protectores" es que la gente que llega con ellos no quiere un perro de raza, sino lo que busca es una referencia para saber si hay perritos como esa persona se ha imaginado, en cuanto a tamaño, apariencia y carácter. Ya que la referencia para saber eso son las razas, por eso es que preguntan.







Pero bueno, si pasaste el examen en ese momento y escogiste tu "peludito" aun no puedes llevarlo a casa, tienen que hacerte una visita y verificar que las condiciones de tu vivienda correspondan con lo que pusiste en tu solicitud y está sujeto a aprobación del "protector" el decidir entregarte o no al perrito.



Si fuiste afortunado después de todo ese proceso y de que se metieron a hurgar en tu casa, deciden darte al perrito. Ahí puede comenzar el verdadero problema. 

Si no te lo dieron, no te preocupes, hay otros muchísimos albergues donde puedes ir a seguir un proceso similar, aunque hay que decirlo, mucha gente se fastidia de eso y mejor compra un perrito, lo cual se hace en una tienda de mascotas o un criadero en unos cuantos minutos.


Aquí lo que pretendo es que los "protectores" revisen su estrategia, creo (a nivel personal conste) que si fuera más fácil el proceso, habría más gente que adoptaría, si utilizaran herramientas de "marketing" más adecuadas, más perritos tendrían una oportunidad. Si en lugar de enojarse dijeran cosas como: -Mira este es tipo maltesito, y aquel otro es como salchicha- La gente tendría mejor referencia y encontraría el perrito que desea, ¿que puede ser que alguien inadecuado adquiera así un perro? Si puede ser, pero si le desea dar un mal uso o abusar de un perro ¿creen que que se tomaría la molestia de acudir a un refugio? Seria mucho más fácil tomar uno de la calle, y así ni constancia deja. 

Creo que hacer fácil el proceso sólo tomando los datos de contacto y verificando que el perrito se encuentre bien tiempo después propiciaría un éxito en las adopciones, ya que varios "rescatadores" que conozco se quejan de que la gente no quiere adoptar perros y acusan a la gente de ser desalmada, cuando a lo mejor ellos mismos tienen que ver con eso.


 Ahora, ¿cual es el problema?
Lo trataremos la próxima semana.



jueves, 26 de mayo de 2016

¿CÓMO CONSEGUIR QUE EL CACHORRO NO ENSUCIE DENTRO DE LA CASA?

O como quien dice: ¿Como controlar la pipí y la popó?






Mucha gente me pregunta si es posible conseguir que un cachorro avise cuando quiere orinar o defecar (esta es la forma correcta de llamarlo), trataré de ser conciso y práctico en esta respuesta espero les sirva para llevarlo a cabo con sus perritos.

Lo primero que debemos saber es que un cachorro es como un bebé humano en ese sentido, necesita estar maduro fisiológicamente y neuronalmente para poder ser 100% efectivo en este control, en promedio los cachorros ya son capaces de "aguantarse" hasta los cinco meses, antes de esta edad no pueden controlarse y 9 de cada 10 veces dejarán un desastre en nuestro piso o alfombra.

Aunque no tengan aun la edad, algunos antes otros después podrán comenzar desde que llegan a la casa con el entrenamiento, es muy sencillo, aunque hay que resaltar que lo más se requiere es <<PACIENCIA>> el cachorro fallará muchas veces, pero lo que importa es que vayamos reforzando sus éxitos y premiando sus esfuerzos.

Olviden el periódico enrollado o el restregarle el hocico en su propia suciedad, eso no servirá para nada más que para que el perro se vuelva desconfiado y la relación perro-amo se vea enturbiada por la violencia.

La forma correcta de enseñarle implica el ser disciplinado, o sea siempre corregir cuando se deba y premiar cuando lo consiga, no vale a veces dejarlo porque no tenemos tiempo de sacarlo o porque tenemos flojera.

Ahora: Es diferente enseñar a un perro que viva dentro de la casa a salir al baño, a enseñarle a hacer en un lado de la casa, sobre periódicos, en el baño o en un rincón del patio, en este caso si no estamos para sacarlo no pasa nada.

En esta entrada nos enfocaremos al perrito que vive dentro de la casa y como enseñarle a salir a defecar y orinar.

La idea es enseñarle al perrito a resistir hasta que uno lo puede sacar a pasear, esto implica la responsabilidad de salir diario con nuestro perro al menos tres veces al día, tu sabes si te conviene.

Si tu caso es este debes comenzar sacándolo siempre inmediatamente después de cada comida, (los cachorros comen tres veces al día) prácticamente no necesitas hacer más, cuando tenga "accidentes" dentro de casa, sólo si lo estás viendo hacerse regáñalo, si solo encuentras la "sorpresa" no tiene caso ya que no te va a entender. El regaño debe mostrar en tu tono de voz desagrado sin mostrarte enojado y sin gritar, pero siempre que lo veas ensuciar regáñalo. Más importante, cuando lo saques a pasear (no olvides llevar bolsitas para limpiar) lleva premios en el bolsillo o su juguete favorito escondido, en cuanto haga su "necesidad" dale un dulce como premio o saca el juguete y arrójalo para que asocie esa conducta con el premio, así refuerzas la idea de que hacer fuera está "bien".

Como ves la técnica es sencilla, lo difícil es tener la paciencia de repetir esta rutina durante meses hasta que tu perrito no vuelva a tener accidentes dentro de la casa.

La próxima vez te enseñaré como hacer que tu perrito orine y defeque en donde tú quieras. 

¡¡Aquí los espero!!

lunes, 14 de marzo de 2016

¿Criar perros contribuye a que haya perros callejeros?


O dicho de otra forma: ¿Prohibir la crianza disminuirá la cantidad de perros callejeros?




A ver: Pensemos con lógica: 

De acuerdo al INEGI existen aproximadamente 18 millones de perros en México, de los cuales el 70% viven en la calle, significa que hay 5.4 millones de perros que viven en casas, la mitad son hembras y la mitad machos, por la curvatura normal de población solo un tercio de las hembras serían fértiles, o sea, esto significa que solo 900,000 perritas estarían en posibilidades de reproducirse, cada una en promedio tendría 8 cachorros al año, considerando que criaran en ambos estros, habría que descontar las que estén esterilizadas, las que pierden a sus cachorros y las que no quedan preñadas (que ocurre más de lo muchos creen) y tendremos que ser un poco especulativos, lo dejaremos en la mitad para fines del ejercicio mental, esto significa que hay 3, 600 000 cachorros nuevos cada año esperando ávidamente ser devorados por la industria. En realidad aquí habría que hacer un ajuste de los que resultan muertos por diversas enfermedades, vamos a ser optimistas y diremos que se reduce en solo 30%, quedando en 2 millones 500 mil cachorros.



Aquí es donde se pone morrocotudo el asunto, seguiremos especulando, leí hace poco una nota de una organización animalista que dice que de cada 4 cachorros, uno es abandonado, en porcentaje es el 25%, equivaldría a 630 mil cachorros abandonados al año.



La población de perros callejeros es de 12 millones 600 mil perros, incluye abandonados y nacidos en la calle por generaciones, si alguien sabe de estadísticas poblacionales sabrá que es imposible que una afluente de individuos que no están adaptados a un medio, prospere para incrementarse 20 veces su tamaño, al contrario, esta población se ve severamente impactada por diferentes enemigos: Enfermedades principalmente, otros perros, veneno puesto por gente desgraciada, vehículos que de manera democrática los atropellan, etc, miles de causas que contribuyen a que esa población disminuya hasta entre un 80% y un 90%  aunque no hay estudios concluyentes, eso equivale a máximo 31 mil 500 perros que se incorporan a la vida callejera de manera exitosa, llegan a edad reproductiva y viven en promedio de 2 a 3 años dejando una abundante descendencia adaptada a la vida en la calle.

Ese es el punto: Adaptación. La enorme población de perros callejeros están perfectamente adaptados a la vida en la calle porque llevan miles de años viviendo a expensas de lo que generamos los humanos, ahora sabemos que pueden ser hasta 30 mil años de ello. Esta población es natural y perfectamente sana, no significa que sean deseables, ya que en algunos casos resultan nocivos y peligrosos, pero es como la población de pájaros o de mariposas.


El punto es que si dejáramos de criar perros no ayudaría en nada a disminuir esta población natural, ya que son perros que no se adaptan nada fácil a la vida que acostumbramos darle a nuestras mascotas, es como pretender tener en nuestras casas animales salvajes, se puede, pero se lleva generaciones domesticarlos. Si dejáramos de criar perros lo que pasaría es que no tendríamos más perros domésticos y la gente dependería de poder capturar uno de la calle para meterlo en su casa, lo cual en una interpretación muy rigorista de la ley de protección de fauna silvestre estaría prohibido, es el equivalente a capturar animales de vida libre y meterlos en nuestra casa.


El perro de criadero cumple una función para mucha gente, no se basa en la belleza o la estética, sino propiamente en las funciones, algunas personas quieren un perro que cuide sus casas de manera eficaz, otros quieren un perro que sea capaz de jugar todo el día con sus hijos, otras quieren un perro chiquito porque no tienen mucho espacio. Para eso fueron creadas y criadas las razas de perros, para satisfacer las necesidades de personas. Claro que los perros callejeros pueden sustraerse y cumplir este fin, pero, el problema es que solo un determinado porcentaje lo logrará, ¿a cuantas personas no conocen que adoptan un perrito pensando que será chiquito y luego crece demasiado? Teniendo que deshacerse de él por falta de espacio, o incluso la posibilidad de que el carácter del perrito adoptado no sea lo dulce que esperamos, puede que haya sufrido maltrato y resulte agresivo en situaciones inesperadas. Esto ocurre demasiado a menudo con perritos rescatados, quienes trabajamos con ellos lo sabemos.







Cada persona debería poder decidir si adopta un perro o si lo adquiere en un criadero, el problema es que las asociaciones animalistas, aunque probablemente sus intenciones son buenas, se basan en una mentira para fomentar las adopciones, la idea de que la crianza es la responsable de que existan perros callejeros es una mentira, aunque sí, es cierto, existen muchos perritos abandonados, es IMPOSIBLE que generen una población tan enorme en las calles.


Lo que es correcto sancionar severamente es el abandono, el adquirir un perrito es una responsabilidad, podrían otorgarse permisos para crianza solo a quien demuestre tener los conocimientos y recursos necesarios, y evitaríamos que esos 630 mil perritos acaben en la calle, no disminuiría la población canina callejera, pero al menos remediaríamos el triste espectáculo de ver un cachorrito que no sabe como sobrevivir solo, morir lenta y cruelmente por enfermedades, o rápidamente bajo las llantas de un camión.


¡NO AL ABANDONO!
¡SI A LA CRIANZA!

miércoles, 9 de marzo de 2016

¿Que aprende un perrito adiestrado? II

Retomando el tema:

Acabas de recibir a tu perrito de la escuela de adiestramiento, estuvo lejos de ti durante poco más de un mes, te mostraron como caminar junto, y como dar las órdenes para que tu perrito te obedezca, te mostraste sorprendido de que tu perrito efectivamente realiza los ejercicios al escuchar la orden, te mostraron como tomar la correa e incluso como aplicar una corrección en caso de que el pequeño se despiste.

¡¡Hasta aquí todo de maravilla!!

Lo subiste al auto y se fue tranquilo, ¡no lo puedes creer!, llegas a casa y lo sueltas en el patio. Entras a casa pensando: Ahora si, ¡que padre es tener un perro obediente!
Y en menos de cinco minutos acabó la magia. Escuchas el ruido clásico de un perro jugando con la tapa del basurero, sales a ver y no eres capaz de encontrar un solo punto del patio que no se encuentre cubierto de basura.

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¿Que pasó? ¿No funcionó el entrenamiento?

La mayor parte de las personas llegan hasta aquí y lo que hacen es pensar que su perro no tiene remedio, y que ni la mejor escuela puede quitarle lo latoso, algunos se resignan, otros regalan, venden o incluso terminan abandonando al cachorro.


¡Nada más equivocado! ¡Aquí es donde comienza lo bueno!

En la mayoría de las escuelas de adiestramiento te deben dar al menos algunas sesiones de práctica para que tu perrito trabaje adecuadamente contigo, pero algo que casi ninguna hace es ayudar a los dueños con los problemas de conducta que se presentan. Esto es lo que provoca el desencanto de las personas y no ven los beneficios del adiestramiento.
Para un dueño de un perro pagar para que el cachorro aprenda a caminar, sentarse y dar la pata resulta poco atractivo, la mayor parte de las personas paga para que su perrito se convierta en un miembro de la familia, para que se porte bien, pueda estar dentro de la casa sin hacer un desastre y puedan sacarlo a pasear sin poner en riesgo su vida, que deje de tirar la basura y de subir las patas cuando te ve vestido con tu mejor traje, que deje de levantar la pata sobre sus muebles y de defecar en la sala.



Ahora: ¿Como se puede obtener eso?

La respuesta es: Se debe comenzar el proceso de educación. Este proceso es diferente del entrenamiento, ya que se basa en lo que el perrito ya aprendió, y muy importante debe ser impartido por él o las personas que habitan la casa junto con el perrito. Es imposible para un adiestrador educar a un perrito, solo en casa puede aprender lo necesario, o mejor dicho en la escuela lo aprende pero solo va a funcionar mientras está en la escuela, al cambiar de ambiente se debe volver a enseñar todas las instrucciones de buen comportamiento.
Es como tener un niño, al enviarlo a la escuela ahí le enseñan lenguaje, matemáticas y ciencias, pero en casa le enseñan a saludar, usar cubiertos y vestirse correctamente. Así es con el perrito, la educación COMIENZA al salir de la escuela, el problema es que a la mayoría de los adiestradores les falta enfatizar la importancia de esto.

¡Tenga un compañero, no un animal!



¿Como se consigue? 

El proceso de entrenamiento preparó al cachorro para obedecer indicaciones, y sobre todo para reconocer la orden que expresa desagrado por una conducta, algo que llamamos "corrección", lo que tiene que hacer la persona es corregir a su cachorro cada vez que haga algo que no quiere, y halagarlo y acariciarlo cada vez que hace lo correcto. Así poco a poco el cachorro terminará adoptando la conducta que se espera de él, sin necesidad de periodicazos o gritos. Es un proceso simple pero que lleva tiempo, se requiere de mucha paciencia, pero es el único método seguro. Incluso puede hacerse sin necesidad de adiestramiento, aunque eso lo vuelve más complicado hay quien lo consigue perfectamente, el adiestramiento solo facilita el proceso. Para quienes ya se encuentran desesperados porque no tienen control de su mascota es muy recomendable buscar la mejor escuela de adiestramiento que puedan y después practicar y practicar con su perrito los ejercicios del adiestramiento.

¡¡ESTOS SON PARA APRENDER CONTROL!!


Si tú crees que no sirve para nada el que tu perrito aprenda a sentarse, echarse, caminar junto y permanecer quieto, debo decirte que te equivocas, estos ejercicios son los que te dan control, tanto dentro de casa como al salir a la calle, entre más control tengas, mejor puedes comenzar a resolver los problemas de conducta.

Entonces: ¿Para que manda la gente entrenar a su perrito? 

Para dos cosas: Para obtener control de él, y para poder EDUCARLO. 

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Muy importante, no lo olvides.

lunes, 29 de febrero de 2016

¿Que aprende un perrito adiestrado?

O como quien dice: ¿Para qué sirve el adiestramiento?


En la primera entrada de este blog intenté (de manera humilde confieso que me quedé muy corto) responder la pregunta: ¿Por qué entrenar a un perro? Ahora abordo el tema desde otra perspectiva: ¿Para qué?, ¿Que fin se persigue o en todo caso que es lo que se obtiene como beneficio?
¿Es bueno para el perro?
¿Es bueno para el humano que cuida del perro?


Primero veamos que pasa en el adiestramiento:

Digamos que decides mandar a tu perrito a una escuela, ya la elegiste porque te gustaron las fotos de su página web, fuiste a conocer las instalaciones, te parecieron limpias, los otros perritos se veían contentos ahí, elegiste un sistema en internado o de llevarlo a clase, en fin ya contrataste el servicio y estás listo para empezar.

Aunque cada escuela funciona diferente debemos decir que una en la que tengan a tu perrito más de dos meses para el adiestramiento básico debería ser revisada por ti para verificar que tenga avances, ya que existe poca regulación y es fácil caer en manos de charlatanes. El promedio de duración es de un mes a seis semanas para este tipo de cursos.

Al finalizar el curso te entregan a tu perrito y ahora si, están listos para comenzar a ver resultados. Aquí es donde muchas personas terminan desorientadas y desilusionadas ya que sus expectativas probablemente no se ven cumplidas. Este es un punto conflictivo, donde terminan encendiéndose emociones y no siempre es culpa de los adiestradores, más que en la falta de explicación oportuna de lo que significa el adiestramiento.



¿Cuales son las expectativas del dueño?

Algunas personas esperan ver a su perrito convertido en Lassie o Rin Tin Tin, una especie de perro maravilla, que deje de ensuciar su casa y destruir todo lo que se encuentra, que permanezca inmóvil como un robot apagado cuando no se le necesite pero se reactive en cuanto a la persona le entran ganas de jugar. Que no ladre para nada excepto si alguna persona malvada pretende entrar en la casa. Que se sirva la comida solo desde el refigerador, la caliente en el microondas y no deje la puerta del micro abierta. Que sea capaz de ir al baño, levante la tapa y le descargue. (Lavarse las patas es opcional) Que sea capaz de combatir un ataque armado con la capacidad de un perro super sayayin, y a una orden se convierta en un manso cordero que juegue con todos su amigos y parientes. (Esta bien estoy exagerando... Un poco)


Desafortunadamente casi nada de esto es factible, entonces ¿para que se manda a la escuela?
Lo explicaré paso a paso, si en algún momento no se comprende el proceso les suplico me hagan llegar sus comentarios para tratar de explicarlo mejor.

Lo primero: Se comienza el proceso de adaptación al collar y la correa, los cuales son instrumentos para conseguir algo muy necesario: CONTROL esto no significa maltrato, al contrario el control mediante sistemas operativos permite la corrección de múltiples problemas de conducta sin la necesidad de regaños, golpes o amenazas. El acostumbrar al perrito a usar la correa y el collar durante todos los días del entrenamiento lo hacen ir moderando su paso, actitudes, juego y energías para comenzar a seguir a una persona. Después discutiremos si la teoría del líder de la manada es o no válida, lo cierto es que después de unas semanas uno percibe que el perrito va muy cómodo siguiendo nuestro paso sin adelantarse y sin ponerse a jugar sin control. De esta manera continuamos con los demás comandos que el perrito va aprendiendo en base a repeticiones de los mismos.

Es muy importante señalar cuales son los comandos del adiestramiento:

-Entrar a trabajo
-Caminado junto
-Cambios de dirección al caminar
-Cambios de velocidad al caminar
-Cambios de posición (echado, sentado y de píe)
-Quieto
-Llamado



Y más importante señalar esto: ¡¡El adiestramiento hasta aquí no es capaz de resolver los problemas de conducta normales en un perro!!

¿Entonces que hay que hacer?

Se los platico la siguiente semana